Faltan 39 días. El contador del Neme Racing Team, camino al Rally Dakar, está a full. El equipo se prepara, el piloto (Ricardo Neme) ultima detalles. Y la camioneta (Toyota SW4) está en plena etapa de puesta a punto, en manos de Ariel Isola. ¿Qué cosas se trabajan? Muchas, a saber...
Al vehículo se lo desarmó por completo. Se sacaron todas las partes mecánicas y se dejó el chasis limpio. Todo se repasó: anclajes, carrocería en general, la jaula. Se revisó que nada tenga fisuras, deterioros o que haya algún bulón suelto. También se repasaron todas las instalaciones eléctricas; hasta el tablero se desarmó. Un tema que no se olvidó fue repasar el sistema de climatización de la cabina y la aislación de polvo y agua. Las ventanillas fueron cambiadas, para tener una mejor visualización. Además, se van a incorporar dos tanques de combustible de 120 litros, se cambiarán los sistemas de gatos hidráulicos y se incorporará un sistema forzado de ventilación exterior. También se incorporarán, en zonas específicas, los elementos de seguridad, como las planchas, las lingas, el compresor, un sistema de hidratación para los días de carrera.
A nivel mecánico, se está reemplazando todo aquello que puede sufrir desgastes: palieres, elementos de frenos, embrague, caja de cambios, mangueras, correas, turbo, etcétera. La tarea llevará hasta la semana próxima. Después, se pondrá la camioneta en terreno para pruebas menores, y con posterioridad, Neme irá a Córdoba para ensayos más rigurosos, con la idea de confirmar que todo esté en su lugar cuando se inicie la competencia en Lima (Perú), el 6 de enero de 2018.
Vale recordar que la camioneta es modelo 2009, pero que se la SW4 original tiene muy poco. La carrocería está modificada para adaptarla a los elementos que se llevarán y que forman parte de la estructura de suspensión, de trasmisión, las ruedas, la distribución del peso, el tanque de combustible. Tiene la forma original, pero todo el frente está cortado, junto con el chasis hasta los largueros (que son los originales). Se hizo un trabajo tubular en toda la estructura de la trompa, de la cola y del piso. Se alivianó todo lo que era posible: por caso, todo el frente de la “chata” es plástico.